sáb. Jul 19th, 2025
Las compras de los hogares Sub 35: los hábitos y las nuevas prioridades a la hora de consumir

En un contexto marcado por la retracción general del consumo, hay un grupo que resiste: los hogares con responsables de compra menores de 35 años muestran una caída menor, realizan compras más grandes y tienen hábitos que empiezan a cambiar el perfil del consumidor argentino.

Según un estudio de Worldpanel by Numerator, este segmento etario no solo registra la menor baja en el volumen de su canasta (-3,6% frente al -4,3% general), sino que además es el que más categorías logró mantener o hacer crecer: 25 productos aumentaron su volumen en estos hogares, contra solo 11 en el total. A la vez, retrocedieron 9 categorías menos.

Estos consumidores jóvenes suelen hacer compras menos frecuentes, pero más grandes. El 45% opta por abastecerse en mayoristas y se lleva más de diez categorías por vez, lo que les da el ticket promedio más alto del mercado. Es el modelo opuesto al de los mayores de 65 años, que compran en menor volumen y con mayor regularidad.

La clave está en la conformación del hogar: el 45% son familias tipo, con hijos pequeños (el 47% tiene niños de hasta 5 años). Esa realidad modifica sus decisiones en la góndola. Algunas categorías tradicionales, como tinturas, vinos y edulcorantes, pierden protagonismo, mientras que crecen otras como postres infantiles, jugos en polvo, cacao y hamburguesas.

A pesar del peso de las familias con chicos, un 31% de estos hogares jóvenes no tiene hijos, lo que refleja una mayor diversidad en la composición y en los hábitos de consumo. En contraste, entre los hogares liderados por personas de entre 35 y 49 años, solo un 18% no tiene hijos.

Los datos también muestran un corrimiento en las prioridades: productos como bebidas alcohólicas o algunos lácteos tienen menos presencia, lo que puede explicarse por nuevos patrones de alimentación, cuidados familiares o restricciones presupuestarias.

Mientras el consumo general se desacelera, este segmento resiste y redefine. Compran distinto, eligen distinto y tienen nuevas prioridades. Para las marcas, el desafío está en entender este cambio y reconectar con una generación que ya no se mueve por las mismas reglas.

EL SOL.-